miércoles, 17 de junio de 2009

REFLEXIÓNES DESPUES DE LAS EUROPEAS


Hace 15 meses ZP al frente del psoe celebraba su victoria mas dulce, derrotando por 3,5 puntos al pp en las generales. Esta vez los populares son los que ganaban por la misma diferencia las elecciones europeas. El resultado da un respiro interno en el pp y permite reivindicar el liderazgo de rajoy. Pero no le da pie para lanzar camapanas al vuelo ya que aún le cuesta conectar electoramente con los descontentos socialistas. Esos casi 500.000 votantes que mudaron de criterio son un toque de atención para los socialistas y sus erráticas decisiones. Tardaron en admitir la crisis, tardaron en combatirla, se convirtieron en rehenes de sus propios vaivenes territoriales y el electorado que siempre es sabio acaba evidenciando su descontento.

Asturias no ha seguido la tendencia nacional. Aqui las europeas las ganó el psoe. Por concejos, los resultados han sido un calco de los últimos comicios autonómicos y municipales. En Oviedo, el pp guarda distancia con sus rivales. En Gijón es al revés. En Aviles y Siero psoe y pp los separaron milimetros. Las Cuencas Mineras, ahí no hay sorpresas, siguen siendo los feudos socialistas.

La vencedora bajo mi punto de vista ha sido, una vez más, la abstención. El 70% de las leyes que ahora se aprueban en el congreso de los diputados son adpataciones de normas europeas. Gran parte de las inversiones que han modernizado España se han sufragado con el dinero de todos los europeos y el tratado de Roma, que en breve entrará en vigor si se supera el último escollo irlandés, dota de más poder al parlamento europeo. Con todo, la legión de euroescépticos se mantiene intacta. Mas de la mitad de los electores decidió quedarse en casa. Aunque dela agricultura a la universidad, de las grandes infraestructuras a las normas sociales, la UE se está convistiendo en algo imprescindible en la vida diaria de los 27 paises que la integran, los ciudadanos no lo perciben asi. El parlamento y la Comisión no dan precisamente un ejemplo edificante con sus sueldos millonarios, sus obstentosos lujos y sus alegres despilfarros con dinero público. Los gobiernos deben plantearse muchas cosas, empezando por la tentación de convertir las elecciones europeas en primarias o camapñas basadas puramente en asuntos domesticos.

Giuseppe Garibaldi, el soldado y patriota que unificó Italia a madiados del siglo XIX, acabó su gesta afirmando: HEMOS HECHO ITALIA, AHORA DEBEMOS HACER ITALIANOS. Si hoy levantase la cabeza, podría decir lo mismo de esa nueva realidad politica que no acaba de calar en plenitud, que es la UE.

Ya tenemos Europa, ahora necesitamos convencer a los europeos.

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